João tiene 13 años y vive en el Brasil profundo. El vínculo con su padre se ha roto. Él no tiene amigos y las personas lo llaman por el cruel apodo de hijo de Buey. En el umbral de la adolescencia, João quiere escapar de ese lugar, donde parece no haber posibilidades de encajarse. Un día, un pequeño circo llega a la ciudad y João entabla una amistad con el payaso Salsicha, que lo alienta a enfrentar sus miedos. Hijo de Buey arroja luz sobre un Brasil contemporáneo, revelando cómo es tejido el afecto entre los hombres en una sociedad extremadamente machista, en un universo de intolerancia y masculinidad donde urge reinventarse.